Desde hace unos años los vecinos de la urbanización Parque de Boadilla vienen manifestando la deficiencia de su actual sistema de iluminación vial y el riesgo que supone continuar con las actuales farolas y circuitos eléctricos de alumbrado. Dado el alto coste que supone la renovación del tendido eléctrico, de las farolas y de las luminarias de los 12 km. de viales de la urbanización, se optó por realizar el proyecto en varias fases, dedicando a las mismas parte del dinero a asignar por el ayuntamiento a las inversiones a efectuar en la urbanización.

Al ser los viales de competencia municipal y al tener que utilizar fondos municipales para la renovación de la iluminación vial de la urbanización, debe de correr por cuenta de los servicios técnicos del Ayuntamiento de Boadilla del Monte, la realización del proyecto, la contratación de las obras y el control de las mismas.

La Asamblea de Compromisarios solicitó al Ayuntamiento que no se utilizaran farolas susceptibles de provocar contaminación lumínica, como las de tipo globo, que viene instalando recientemente en otras partes del municipio. A lo cual se negó el equipo técnico del Ayuntamiento indicando que las farolas tipo globo son las que quieren utilizar habitualmente en este tipo de instalaciones y de modo uniforme en todo el municipio.

La contaminación lumínica es, básicamente, la luz dirigida al cielo desde las instalaciones de alumbrado de exterior, que dejan escapar parte del flujo luminoso por encima de la línea del horizonte. Tal contaminación produce un incremento del brillo del fondo natural del cielo, con todas las consecuencias medioambientales que ello implica, y una ocultación de las estrellas del firmamento, que afecta directamente a todos los aficionados a la astronomía.

El ejemplo más claro de contaminación lumínica se produce con las farolas en forma de globo, que pierden el 50% de luz hacia el cielo. Otro ejemplo, serían las farolas inclinadas con transparente abombado, que dejan escapar por encima del horizonte de un 30 a un 40 por ciento de su flujo luminoso.

Esa luz que se pierde no cumple el objetivo para el cual fue instalada: la vía pública y el ciudadano o el automovilista. Por otra parte, esta luz supone un gasto energético añadido. Cálculos del Instituto Astrofísico de Canarias dan un 30 por ciento o más de energía desperdiciada a causa del deficiente apantallamiento de los sistemas de alumbrado público. Lo ideal es que el máximo porcentaje de energía consumida se aproveche para el fin al que fue destinada. Es preciso aumentar la eficiencia en el consumo energético.

El CIE (Commission Internationale de l'Eclairage) es el organismo internacional que se encarga de recomendar los máximos porcentajes de luz lanzada al cielo, que se deben de admitir en las instalaciones de alumbrado exterior, dichos porcentajes los estableció en 1996 en su norma CIE-126.

La unidad de mediada utilizada es el porcentaje de la luz emitida que se dirige al cielo, denominado %FHS, o porcentaje de Flujo al Hemisferio Superior.

En la siguiente tabla se indican los máximos porcentajes FHS admitidos para los niveles E4 y E3, recomendados para las ciudades y definidos en la norma CIE-126. En la misma tabla se ha incluido a efectos comparativos los niveles que autoriza la legislación canaria para las islas de Tenerife y La Palma.

Córdoba ha estado entre las primeras ciudades españolas en asumir la norma CIE-126, su ordenanza de Protección del Cielo Nocturno de Córdoba ya ha dividido la ciudad en zonas de tipos E3 y de E4.

El Ayuntamiento de Madrid ha sido denunciado en repetidas ocasiones ante el Defensor del Pueblo por incumplimiento de la norma CIE 126. El Jefe de Alumbrado del Ayuntamiento de Madrid aseguró al Defensor del Pueblo que la modificación de las farolas tipo globos cumpliría pronto la norma CIE 126 (es decir FHS < 5%).

El Grupo Cielo Oscuro, se entrevistó hace unos meses con los responsables de alumbrado de Boadilla del Monte, por ser nuestro municipio uno de los Ayuntamientos que menos caso hace a las normas contra la contaminación lumínica. Algunas de las ideas del técnico de alumbrado del municipio resaltaban el hecho de que la ausencia de Contaminación Lumínica en el alumbrado hace muy tristes las ciudades y que es mejor que se iluminen las fachadas.

Es evidente que los responsables de la iluminación de nuestras calles no adoptarán las medidas oportunas contra la contaminación lumínica hasta que exista cierta presión popular.

Veamos lo que ocurrió este año en Avila: Hasta agosto de 1999 Avila seguía en la línea de colocar luminarias con un porcentaje de flujo del 35-40% FHS. Se solicitó al Ayuntamiento que redujera sus niveles de contaminación. Nada. Se expuso el tema a la oposición y a los medios de comunicación. La última semana de agosto la ciudad de Ávila empezó la primera instalación de faroles eficientes en la Avenida de Madrid (la que circunvala las murallas).

El Grupo Cielo Oscuro inició en septiembre de 1999 una nueva campaña de entrega de documentación en las oficinas de registro de los Ayuntamientos de más de 10.000 habitantes de la Comunidad de Madrid. El Ayuntamiento de Boadilla del Monte lo recibió a primeros de octubre. La documentación incluía un buen número de páginas pertenecientes al informe del Comité Español de Iluminación, la primera hoja de la Ordenanza de Protección del Cielo Nocturno vigente en Córdoba, una del Tribunal Superior obligando al Ayuntamiento de Madrid a contestar todas las quejas de los vecinos, una pagina perteneciente al diario El Mundo del 14 de agosto con el título: "La Contaminación Lumínica impidió ver las Perseidas. Las farolas sin visera derrochan solo en Madrid 2.500 millones".

A finales de septiembre comenzó en Vicálvaro, en la zona del Paseo de Artilleros y calles contiguas, la sustitución de globos normales por otros opacados. Casi todos son de los acodados en báculos, aunque también se ha sustituido alguno tipo chupa-chups.

El Partido Popular manifestó su apoyo a las medidas contra la contaminación lumínica el 1 de julio de 1999 en el Congreso de los Diputados. La diputada y responsable de Medio Ambiente de dicho partido, Doña María Teresa de Lara, expresó su pleno apoyo a la lucha contra la contaminación lumínica. Indicando que se iba a incluir dicho tema en el programa nacional del PP a elaborar en Septiembre-Octubre y el apoyo total a la elaboración de una ley que limite la Contaminación Lumínica a nivel nacional. Sin embargo, dado que en Febrero se disolverá la cámara, y los últimos meses del año se dedican a los presupuestos, no será factible acometerlo en la presente legislatura y se deberá plantear después de las elecciones generales de Marzo. Una ley de esta naturaleza obligaría a los Ayuntamientos, al igual que lo hace la de residuos. Doña María Teresa no vió ninguna incompatibilidad en el hecho de que el alumbrado sea responsabilidad de los Ayuntamientos.

Por lo expuesto más arriba es evidente que el Ayuntamiento de Boadilla del Monte ya conoce otros documentos sobre la contaminación lumínica y que sus técnicos ya han recibido visitas informativas sobre las presentes cuestiones. Por todo lo cual es bastante probable que este nuevo documento tampoco consiga que los técnicos de nuestro municipio vean la importancia que la contaminación lumínica supone para nuestro municipio. Situación por otra parte compresible, pues en caso de tomar medidas contra la contaminación lumínica, sin la participación de los ciudadanos o de sus representantes, se exponen a las críticas fáciles sobre una incorrecta iluminación del municipio: ¡Antes estaba más bonito!, ¡Antes había más luz!, ¡Son más bonitas las farolas tipo globo!, etc.

Yo me vine a vivir a Boadilla del Monte en el año 1986, por aquellas fechas podía disfrutar de un firmamento lleno de estrellas, eran visibles a simple vista la mayoría de las constelaciones. Con el tiempo me compre un pequeño telescopio y con el he pasado algunas noches muy agradables. Hoy ya he perdido más del 50% del firmamento, solo consigo distinguir las constelaciones dirigiendo mi telescopio al norte, hacía el parque regional del Guadarrama, en el resto del cielo solo son apreciables las estrellas de mayor magnitud. El desarrollo de Boadilla en los próximos años será imparable y, sin duda alguna, nuestras noches serán mucho más luminosas y acabaremos perdiendo la totalidad del firmamento.

Aún estamos a tiempo de impedir un daño mayor, puede que este documento no lo consiga, pero con la participación de muchos otros vecinos, de muchos otros amantes de las estrellas y de los cielos oscuros, seguro que si lo conseguiremos.

Para los vecinos que piensan como yo, para aquellos que quieran que sus hijos puedan disfrutar de un cielo como el que tuvimos hace unos pocos años, he incluido un par de modelos de carta a dirigir a nuestro Ayuntamiento: el primero en la misma línea de las que el Grupo Cielo Oscuro está enviando a numerosos Ayuntamientos de la geografía española, el segundo similar al que el Grupo de Estudios Astronómicos de Puertollano dirigió a su propio Ayuntamiento.

Entiéndase en cualquier caso que estos documentos solo sirven para sensibilizar al Ayuntamiento, a todos y cada uno de nuestros representantes, sobre el problema de la contaminación lumínica en Boadilla del Monte y en ningún caso pretende iniciar o continuar ningún tipo de rivalidad o desprestigio político. Escojan pues el modelo que más les guste y remítanlo con su nombre y DNI al Ayuntamiento de Boadilla del Monte.